Hoy traigo un sencillísimo diseño en el que combino dos tipos diferentes de esmaltes. Es muy rápido, pero de esta forma nos permitimos mantener nuestra manicura perfecta y original incluso cuando no tenemos demasiado tiempo.
Los esmaltes con toppers o los top coats con toppers son una forma muy rápida de decorar nuestras uñas. Podemos usarlos cuando queremos tener un diseño bonito y sencillo y no contamos con demasiado tiempo.
En el mercado podemos encontrar infinidad de esmaltes y top coats con estas características. Con toppers de diferentes tamaños, diferentes formas, diferentes tonalidades...
Para la manicura de hoy he elegido dos esmaltes: El primero que está en todas las uñas menos en el anular es de Flormar, Black Dot BD02 Este que yo he usado es de la nueva colección y cuenta con muchos colores muy combinables y bonitos. El negro plomo que he usado en la uña anular es de Kiko, Magnetic nail lacquer 707.
Como resultado tenemos una manicura diferente pero sin haber empleado demasiado tiempo.
Un característica de los esmaltes con toppers que a mi personalmente me encanta es que no quedan dos uñas iguales, lo que le da un toque de originalidad a cada uña.
Tan sencillo como aplicar dos capas de esmalte de uñas en cada uña para el acabado que se pueden apreciar en las imágenes.
Este esmalte deja bastantes toppers en cada pasada y eso es poco común en los esmaltes con toppers o purpurina, que hay de aplicar varias capas. En estas imágenes solo hay dos capas de cada esmalte.
El negro plomo que he usado es un esmalte magnético. A mi usar estos esmaltes con el imán no termina de convencerme, sin embargo como base o como esmalte normal me gusta muchísimo porque ofrece un tono metalizado precioso.
Y esta ha sido mi sencilla manicura de hoy. Como ya he dicho, perfecta para ocasiones en las que no tenemos demasiado tiempo pero queremos lucir unas uñas vistosas.
Espero que os guste.
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